viernes, febrero 20, 2009

Homenaje


Ahora los puntos finales están ya puestos --puntos finales, no puntos suspensivos--, y veo que, a pesar de todo, mi historia no es un aullido ante lo desconocido, aunque muy bien podría haberlo sido. En un río, un pequeño Danubio loco, que ha perdido la memoria de sus Alpes, de sus nubes densas y que avanza para desaparecer en un país que nadie conoce: lo inombrable.

Pero, como río loco, no busco el consuelo del reconocimiento. Prefiero el instante abrupto, roto. Que esta mesa en la que escribo haya nacido ahora y aquí, y lo mismo mi mano y mi pluma. Y que tu sonrisa de cien años, Agustín, sea sólo una sonrisa nacida para mí, con tu clarinete, con las monedas que vuelan efímeras por el aire, y que la noche de Viena cante con nosotros: Alles ist hin, todo se ha ido, como los ríos del deseo y de la muerte; todo se ha ido hacia el silencio que guardan las pirámides. Alles ist hin

[Luis Martín Santos, Encuentro en Sils-María, 1986]


NOTA AUTOBIOGRAFICA

Nací en Alar (Palencia), pueblo que no parece tener más razón de ser que la estación de ferrocarril. Mi padre era telegrafista y hombre de ideas. Tengo que agradecerle que no me permitiera ir a la escuela, de la que, a cambio de una buena letra, nunca se sale cuerdo. Después hice varias licenciaturas, sin que nadie pudiera acusarme de frecuentar las aulas. Sin mucha gramática, hablo alguna que otra lengua.

Ahora tengo casi cincuenta años, soy profesor y enseño lo que me mandan, que no es poco. A veces añado lo que bien quisieran que me callase, que es bastante. Por lo demás vivo en una provincia tan deprimida como deprimente, y lucho por eso que vagamente se llama cultura. Otros han hecho lo mismo y ha sido inútil. Esta vez ya veremos. Lo que he escrito, poco o mucho está sin publicar. Pienso, como la mayoría de los españoles, que se debe a la censura, que en este país lleva siglos afilándose las uñas; pero vaya usted a saber.

Soporto a diestro y siniestro; me conformo; si puedo me río. Lo que no haré es exiliarme: aquí nací y aquí me quedo. En fin, querido lector, confío en que no necesites de mí, pero si llega ese trance y no queda mejor remedio, dímelo. Me encontrarás.


Viva!

Sé que aun no es primavera, pero todos los años, por estas alturas me entran muchas ganas de vivir. Creo que es el sol, que me carga las pilas, y también el fin de exámenes. El cambio de estar encerrada en la biblioteca (y jaulario) todo el día y que de repente puedas salir en camiseta (durante el día) y haga sol...
Y encima... mañana es carnaval!

lunes, febrero 09, 2009

Domingo de locura

Domingo 8 de Febrero, último domingo de Jaulario para la mayoría de nosotros (al menos hasta junio). Último Domingo de ida de pinza. Empieza con: Blanca llegando a las 2 al aulario cargada de arroz 3 delicias, tallarines 3 delicias, fideos 3 delicias, palillos, salsa agridulce, rollitos de primavera y demás. A partir de ahi, todo es posible.

El resultado final queda reflejado en estos documentos gráficos:

El logo de la Koro con los palillos:

Nuestro gran Collage en la fotocopiadora:
Y el café transgénico del Jaulario...
(No solo el palito se mantiene derecho en medio del café cuando el vaso está lleno, sino también cuando hay menos de 1 cm de café xD)