Sobre vaciar la taza

Entrenamiento, ducha, cena, peli y una sisha. O una buena peli y una buena conversación a miles de kilómetros de distancia. A veces está bien tener algo de tiempo para pensar y analizar las cosas. Cuando estoy lejos de Valladolid puedo analizar todo desde fuera y tomar decisiones, o sobretodo ver que cosas necesitan una.
Como siempre, Irlanda me ha devuelto la calma. Ha sido una vuelta a mis orígenes, a los recuerdos de miles de horas espanzurrados en el césped hablando y hablando. Valladolid-Madrid-Dublín-Calzada de los gigantes-Belfast-Saint Patrick en Dublín-Limerick-Aran Islands y vuelta a Dublín. Volver a ver a viejos amigos y perderme en bici por las Islas de Arán. Sentir el aire en la cima de un acantilado oyendo solo el mar y el aire, y que lo único hecho por la mano del hombre que se vea sea un fuerte del 2000 AC.
Y todo esto, en la mejor compañía. GRACIAS :D

Ahora toca, como bien dijo ayer Yuriko, vaciar la taza, escurrir hasta la última gota, limpiarla, y después: a volar :)

Edito:

CUENTO ZEN

A university professor went to visit a famous Zen master. While the master quietly served tea, the professor talked about Zen.

The master poured the visitor’s cup to the brim, and then kept pouring. The professor watched the overflowing cup until he could no longer restrain himself.

“It’s overfull! No more will go in!” the professor blurted. “You are like this cup,” the master replied, “How can I show you Zen unless you first empty your cup.”